miércoles, marzo 11, 2015

Apenas quedó un leve rastro de nuestras sospechas


                                                          Ilustración Becca Stadtlander


Apenas quedó un leve rastro de nuestras sospechas. Sabíamos por instinto que el deseo contenido a lo largo del tiempo mataba la cordura, pero nunca imaginamos que el simple roce de nuestros dedos nos devolvería a la más cruda realidad.

Habrías sembrado la semilla. Habrías recogido los frutos todavía verdes y me  habrías dejado volar con el único recuerdo: el de mis versos que recorrerían el más profundo abanico de mis sensaciones dormidas.





6 comentarios:

  1. Se o desexo se plegase á cordura...moita famiña pasaríamos!!
    ;-)

    Bicos

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  2. Si, o desexo ten que voar libre.
    Gracias Chousa
    Un biquiño.

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  3. Tanto podemos errar por escoitar ese instinto como por non escoitalo.
    Leín varias veces o texto, da para unha boa reflexión.
    Moi fermoso Mariola!!!
    Bicos

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  4. Graciñas balbi.
    Ás veces as emocións son difíciles de poñer sobre o papel e darlles o sentido que ti queres que leven.
    un biquiño balbi.

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  5. Las emociones son sensaciones que no tienen traducción. Se sienten.
    Sigue emocionándonos.
    Gracias por esa sensibilidad, que ayuda al ser menos dura la vida.

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  6. Muchas gracias.Un fuerte abrazo.

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