Calla conscientemente
y en un susurro
desbloquea el pensamiento.
Protege mi lucha diaria
con un cuenco tibetano.
En un haz de luz
asalta mi espada.
Y atrapa el silencio
y el alma despierta.
Y duerme el sonido.
Yo lo sigo con los ojos cerrados.
No me hace falta nada más.
Atrapar o silencio a base de susurros e cos ollos pechados, ten que ser unha marabilla. Madía levas ti a decir que non che fai falta nada máis...
ResponderEliminarBicos ó caladiño
…………..
ResponderEliminarCada uno tenemos nuestro propio “click”, ese chasquido que es capaz de ponerlo todo del derecho, o del revés.
Biquiños.
P.d.: Teño algún problemiña para deixarche comentarios por eso ás veces tardo tanto en vír ó teu blog.
Casi una meditacion guiada!
ResponderEliminarMe encantò.
un abrazo.