sábado, julio 09, 2016

Después del último ocaso


                                                        Imagen sacada de la web


Fui consciente de tu pérdida. Después del último ocaso.
Pertenecías al viento y al agua
y yo era tierra rojiza.
Hablablas lenguas extrañas
mientras las mías, sin artificios,
luchaban por imponerse
en tus raíces.
Yo era calor y poesía,
tú furia y tempestad.

Yo te hacía el amor
con mis ojos y mis manos,
tú me cogías y te derramabas en mi ser
sólo por pura necesidad.

Fui un invento tuyo 
para saciar tu sed
y yo seguía mendigando
una caricia que contentase
las llagas que provocabas en mi vientre.
Fui pequeña, soñadora a pesar de todo.
Fui invierno cuando sólo quería
un verano que calentase mis pechos.
Fui oscuridad gracias a ti.
Ahora, después del último ocaso
ya no me perteneces.
Y no me importa.